nueva vida

He dejado la casa y mi condición de niña buena

desde este agujero donde se reclama vida y palabras

huérfana y enemiga de mí

vomito deseos y me embriago en sueños

exorciso fantasmas y recolecto miedos

para pegarlos como estampitas en el fondo

de mi maleta...

De esta huida sólo me ha quedado

la maleta

el paraguas y

el libro viejo de Becket...

He querido mudar de identidad pero fue imposible dejarme atrás

a mis espaldas corrían presurosas ellas...

ganándose las pisadas

queriendo ser una primero que la otra...

No puedo huir tan lejos que no las tenga cerca

(Pienso en aquel árbol, el de la discusión en el libro de Becket, seguramente tampoco me servirían a mí sus ramas. Igual que Estragón soy tan endeble que sería inútil intentar la huida definitiva)

Vida y muerte en mí, conmigo, detrás mío.